Municipalidades invierten Q33.5 millones en mantener sus plantas de tratamiento - Ojoconmipisto.com

2022-08-19 21:42:50 By : Mr. Shunye Qiu

Las estructuras requieren materiales y contratación de profesionales para funcionar de forma adecuada. Cubrirlos, en algunos casos, requiere un presupuesto millonario.

Terminar de construir una planta de tratamiento de aguas residuales no implica acabar también con los gastos relacionados con ella. Necesita mantenimiento, reparaciones y especialistas para planificar estas operaciones. Las responsables de sufragar estos gastos son las municipalidades.

Durante la administración actual, las alcaldías destinaron Q287 millones 84 mil 425 a plantas de tratamiento de aguas servidas. De esto, Q33 millones 532 mil 249 se invirtieron solo en la conservación de los sistemas a través de comprar químicos, filtros, agua cruda, arreglar las máquinas o cualquier herramienta para sostener el lugar.

Una de ellas es la de Mixco, Guatemala, donde en mayo de 2020 se adquirieron suplementos químicos, mangueras y equipos de cloración para las cuatro plantas en el lugar, por Q2 millones 716 mil 50. Dos meses después, pagó Q627 mil 200 por dar mantenimiento mayor a los sistemas, donde se cambiaron todos los materiales filtrantes.

En diciembre de ese año compró agua cruda para abastecer los tanques de estos lugares por Q89 mil 700. La adquisición se repitió en febrero de 2021 por Q89 mil 850 y en mayo por Q89 mil 250. Además, se reabastecieron los suplementos de inyección por Q2 millones 907 mil 280.

Otra de las comunas que invirtieron en esto es la de Santa María Visitación, Sololá. En agosto de 2021 destinó Q89 mil 900 para la activación y limpieza de la planta de tratamiento ubicada en el caserío Montecristo, y otros Q88 mil 68 por estos servicios en la del caserío El Porvenir. Quien se encargó de estos trabajos fue la constructora Jorfraniel.

“A la empresa no solo se le pagó para mantener la planta, sino también para capacitar al personal en el uso adecuado de las máquinas y todos los sistemas. Si hacen bien su trabajo prolongan la vida útil del equipo”, explica el jefe edil, Mario Dionisio. Aunque esa ciudad no integra la cuenca del lago de Atitlán, dice, invierte en procesar aguas grises porque las alcaldías tienen obligación legal respecto a este tema.

En efecto, la responsabilidad no es solo moral o ambiental. En Guatemala existe el reglamento de descargas y reuso de aguas residuales desde 2006 y, entre otras acciones, obliga a los 340 municipios del país a tratar su agua. Su entrada en vigencia se ha prorrogado en cinco ocasiones, pero la última estableció el 2 de mayo de 2023 para que todas las comunas tengan sistemas de procesamiento al menos para las dos principales fuentes de descarga en sus territorios.

La tarea no acaba allí, porque para el 3 de mayo de 2027 las municipalidades deberán procesar el 60 % y cuatro años después, el 100 por ciento. Para quienes incumplan, se aplicará desde una advertencia hasta multas y reparación del daño ambiental causado por esa omisión. Las sanciones se amparan en la Ley de Protección y Mejoramiento del Medio Ambiente.

Para el especialista en abastecimiento de agua, Enrique Batres, aunque invertir en la construcción y conservación de plantas de tratamiento es costoso, no se puede evitar, porque la reutilización del recurso es una acción para garantizar su disponibilidad. Ese reuso solo es posible si el agua se procesa, porque es “imposible” tener la misma calidad antes y después de emplearla para la industria, tareas del hogar, higiene personal, entre otras acciones.

“La receta para gastar menos en todo lugar con máquinas es darles mantenimiento a tiempo. Así se evitan fallas mayores, onerosas, que generan daños irreversibles y por lo tanto la compra de un sistema nuevo”, explica el especialista. Cuando se realizan estas acciones preventivas, estima una duración de 15 a 20 años para las plantas.

En los últimos dos años y medio, 26 alcaldías adjudicaron eventos para conservar sus sistemas y pertenecen a 14 departamentos. Los ocho restantes, donde los municipios no registran estas operaciones en Guatecompras, son Chiquimula, Izabal, Jalapa, Petén, Retalhuleu, San Marcos, Suchitepéquez y Totonicapán.

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