¿Será que cada año decimos lo mismo o este es especialmente caluroso? Estos días la temperatura ha subido un poquito más de lo esperado, al parecer nos hemos acostumbrado a que superar los 40º es normal, y es cuando hay menos ganas de cocinar. He pensado que, ya que parece ser que tenemos un sentimiento colectivo de poca actividad culinaria podía ser una buena ocasión apostar por un menú fresquito y fácil.

No olvide darle algo de beber a los más pequeños y mayores durante el día.  Pero atención, porque, a pesar de lo que pensamos, tomar bebidas frías o heladas no es la solución más efectiva. Tomar demasiadas bebidas frías acelera la deshidratación de nuestro organismo, por lo que a largo plazo tiene el efecto contrario.

Mi primera reacción fue pensar que les había afectado el calor a los lugareños, sí, en el desierto también vive gente, no es como en las películas, pero después pensé "estas personas, si han sobrevivido es por algo y hay que seguir sus costumbres". Y este es un “truco” que utilizan los beréberes.

El té caliente permite a nuestro organismo autorregularse más fácilmente provocando un choque de temperatura que nos hace sudar y con ello refrescarnos. En cambio, beber té frío, da una señal a nuestro cerebro de que tiene que generar el efecto contrario.

Evita los platos pesados, calóricos y calientes. Cámbialos por gazpachos, ensaladas, abundantes verduras frescas, y fruta de temporada de muchos colores. Disfruta de los melones, sandías, pepinos, pimientos, tomates y muchas frutas y verduras de verano, ya que estamos en plena temporada y sus nutrientes son beneficiosos para las temperaturas elevadas y las exposiciones al sol.

1 filete pequeño de salmón crudo

4 cucharadas de queso crema para untar

Nueces o semillas de sésamo

Con un pelador de verduras o una mandolina, cortar las lonchas de calabacín o pepino en forma vertical.

Colóquelos a lo largo, superponiéndolos para que forme la base que luego puede enrollar. Séquelos con una toalla de papel para absorber el exceso de agua.

Unte queso fresco. Luego, ralle el limón sobre el queso crema. Agregue rodajas finas de salmón crudo. Espolvorear con semillas de sésamo doradas y poner trozos de aguacate (bien cortados).

Enrolle con fuerza. Por último, corta para obtener un rollito

4 lonchas de jamón ibérico

3 cucharadas de zumo de limón

3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra

Pelar el melón y cortar la pulpa en pequeños cubos.

Cortar las lonchas de jamón o pavo en tiras finas y cortar el queso feta en cubos.

Para la salsa: en un bol verter el jugo de limón, sal, pimienta y mezcla. Añadir el aceite de oliva, mezclar enérgicamente hasta obtener una buena emulsión e incorporar el tomillo.

Coloque la ensalada, el melón, el jamón, el queso feta y la salsa en una ensaladera y revuelva justo antes de servir.

Media taza de dátiles medjool triturados

Una cucharadita de extracto de vainilla opciona

En un bol, mezcla todos los ingredientes hasta que estén bien integrados. Cúbrelo y colócalo en el frigorífico durante una hora.

Agrega la mezcla bien fría en una máquina para hacer helados, puedes reemplazarlo por un bol que pueda entrar en otro más grande que contenga agua fría y hielo y hasta que se convierta en una textura suave para servir. Si el hielo se derrite aña más al agua hasta que la textura sea la deseada. Es una manera de hacer un baño maría frío.

Otra opción es congelar previamente el yogur en bandejas de cubitos de hielo. Una vez congelado introduce junto a los dátiles en una licuadora o procesador de alimentos de alta velocidad. Mezclar hasta que esté suave. Agrega los arándanos y colócalo en el congelador hasta que se congele.

Sirve inmediatamente o mételo en el congelador cubierto.

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